Época: América borbónica
Inicio: Año 1700
Fin: Año 1810

Antecedente:
Las colonias francesas



Comentario

Louisiana era una colonia en el bajo Mississippi, pero para los franceses era teóricamente el territorio existente entre el sur de la Nueva Francia y el norte de México, al oeste de las colonias inglesas en Norteamérica. Es decir, casi todo lo que hoy son los Estados Unidos.
Con el siglo empezó realmente el intento de colonización en la Louisiana, que prácticamente se había descubierto a fines de la centuria anterior. Pierre y Jean Baptiste Le Moyne, señores de Iberville y de Bienville, fueron sus impulsores. El primero de ellos, marchó a Francia buscando apoyo para la colonización y se vio inmerso en la Guerra de Sucesión española, que quiso aprovechar para expandir la Louisiana a costa de las colonias inglesas en Norteamérica. Murió en La Habana cuando se preparaba para ello y le sucedió su hermano Bienville, quien decidió ocuparse de los cien colonos establecidos en la desembocadura del Mississippi. En 1711 fundó Mobile, en la bahía del mismo nombre, trasladando allí a los pobladores que había en Biloxi. En total se reunieron unos 400 entre colonos y soldados. La firma posterior del tratado de Utrecht no tuvo consecuencias para Louisiana. Bienville hizo una campaña de alianza con los indios y en 1716 erigió Fort Rosalie, aguas arriba del Mississippi, que se convertiría posteriormente en Natchez. Tras un desafortunado intento de la Compañía de Occidente para monopolizar Louisiana, cuyo único resultado fue el envío de algunos colonos alemanes, presidiarios y prostitutas franceses y algunos esclavos, Bienville fue nombrado Gobernador. Una de sus primeras actuaciones fue fundar Nueva Orleans en 1718, a unos cien kilómetros de la desembocadura del Mississippi. Pronto sería la capital de la colonia y la cabecera de un pequeño hinterland en el que se cultivaba tabaco, arroz y legumbres. Bienville administró la colonia hasta 1743 y durante sus diez últimos años, como gobernador real. Logró mejorar algo la situación de Louisiana y la conectó con Nueva Francia, pero fracasó en sus intentos de expandirla hacia Texas y de sostener buenas relaciones con los indios. Hubo tres guerras con los indios Natchez y muchos conflictos con las tribus de Arkansas. La política de fortificaciones en el Mississippi condujo, además, al enfrentamiento con las colonias inglesas, que vieron frenada su expansión por el oeste. La colonia no logró sobrepasar los diez mil habitantes (1763), incluidos los esclavos. Tampoco se logró ninguna producción agrícola comercializable de importancia. Tras la Paz de París (1763), que motivó la pérdida de Nueva Francia, Luis XV no manifestó el menor interés por seguir sosteniendo una pobre colonia ambicionada por los ingleses y la cedió a España.